¡Qué viva El Salvador!

Hola, de nuevo. Ando fértil este día, así que aprovechemos a repartir el pan y los peces como se debe. La sección creada hace unos minutos trataba acerca de la manía salvadoreña de ocupar el spanglish como forma de comunicarse. Esta entrada es un anexo de la anterior y, por ende, será más corta. Empecemos, pues, a predicar.

Los hombres salvadoreños somos especiales en nuestro trato con nuestros conocidos y desconocidos. Es graciosísimo tener a un Atlacátl departiendo con sus compadres como todo un macho alfa, pero en cuanto tiene al "encule" enfrente, este se vuelve más tierno que un pitufo. Aclaro que no estoy a favor de que tratemos a las mujeres como los trogloditas que solemos ser la mayoría del tiempo, pero cambiar de forma tan repentina es risible. Después nos preguntamos por qué nuestros amigos nos destruyen el ego luego de que nos ven haciéndole "el levante" a la doña.

Pongamos, pues, un ejemplo de lo que hablo. Imaginen a un tipo cualquiera que, al encontrarse conmigo en la universidad, me saluda como hoplita hacia su emperador:

"Aja, ¡hijuelagranputa! ¿Cómo estás, mierda? ¿Bien? ¡Eso es verga! Va, pues, ¡salú, cerote!"

Sin embargo, cuando este regresa a casa y revisa las novedades de su Facebook -por ejemplo- zampa en las páginas de la eternidad una lira como esta (por razones de anonimato, censuraré cualquier nombre):

"Te quiero un puño XXXXXxxxxxxxxxx!!
Gracias por ser tú misma! Y creeme que me hiciste una gran falta!"

Esa frase me lleva a otro punto que quería tratar. Alguien explíqueme qué es eso de "gracias por ser tú misma". No comprendo. Es como esta otra frasesita bastante famosa que dice "no cambies". Por Dios. Es que si a uno le dicen eso es porque el remitente no tiene ningún piropo decente para regalar. Definitivamente, los salvadoreños y salvadoreñas, a veces, somos los polines que cimientan al intelecto. Pero, lo mejor, es cuando ambas se juntan: "Chepe, gracias por ser tú mismo, no cambies!!!!!" Satanás de las diatribas. Piénsenlo muy bien la próxima vez que les pongan algo así en vez de estar salivando porque les zamparon algo en su "nick" del messenger.

Bueno, mis mariposones y maripositas, espero que los angelitos bajen de los cielos para arruyarlos mientras les dan tiernos besitos en sus cachetes. ¡Gracias por ser ustedes mismos, y no cambien!

Como diría un antiguo brujo togolés: "Saha ahaha".

Chepe