domingo, 27 de julio de 2008

Fetiches cibernéticos (parte 1)

Buen día, mis queridos parroquianos. Hoy me siento lo suficientemente viril como para escribir un par de sandeces. Fíjese usted que, mientras navego por las turbias mareas cibernéticas, a cada rato me topo con sitios que no hacen más que provocar que mi diafragma atente contra mi caja toráxica. Hablo de los blogs que se encargan de desplegar retazos de literatura -o, en su mayoría, seudo literatura- que, en su vano intento de mostrar al mundo los iluminado que es su autor, solo me provocan un tierno ja-ja-ja.

No obstante, mis queridos colegas de la red, no es su aportación binaria -al menos, no del todo- lo que hace que mis gónadas pierdan la potencia que un jabalí necesita para ejercer su dominio en la manada. No. Los que me provocan la necesidad de engullir carbón hasta exhalar fuego por el ombligo son los publicanos y fariseos dizque poetas que se reúnen a vomitar estúpidas maravillas de lo que le pareció lo que acaban de leer. Por favor, póngase en mi situación por un segundo: he ingresado a un blog que me presenta un poema hermoso de autoría de quien lo publicó, para luego toparme con comentarios como: "Me parece excelente lo que quieres decir con esto, tienes una forma increíble de ver el mundo y deberíamos aprender de vos", "esto, si uno lo analiza bien, da miedo", "sin duda alguna, el mejor poema que has publicado :D!!!" (este último comentario me parece harto gracioso, pues las estadísticas me dicen que el mismo individuo ha publicado la misma lambisconería para cada entrada que le haya gustado).

No crea que me he quedado estancado en los simples -pinches- comentarios. He ido un poco más allá al investigar el porqué de estas ladillas "pixeleadas", y he llegado a la conclusión de que estas personas comentan por los siguientes motivos:

1) Porque de verdad les gustó el poema y quieren dar sus felicitaciones al autor.
2) Porque buscan que otra gente visite sus blogs.
3) Porque son lambiscones.
4) Porque creen que, llevándose con el autor de blog, tendrán más caché virtual.
5) Porque el autor es miembro de un grupo cerrado de "camaradas" cuyo propósito es hacerla de Cervantes con su Don Quijote.
7) Porque no pueden dejar pasar la oportunidad de pasar de "talegones".
6) Porque Dios lo quiere.


De las cinco propuestas que he zampado anteriormente, la que tolero es la número uno. Ahora bien, usted pensará que defiendo esa puesto que conlleva una alabanza, y afirmará que estoy resentido porque quizá a mí no me llueve maná del cielo. Pues si usted fuera un fiel seguidor de mi tabernáculo "blogspotero" se daría cuenta de que recibo más puteadas que apretones de mano, y eso me mantiene contento, ya que así me doy cuenta de lo que de verdad piensa el público. Notará, también, que no enumeré la opción de "para señalar cosas que puedan mejorarse, o expresar su descontento con los publicado por el autor". Esto es porque, en el 96% de los blogs visitados, nunca encontré opiniones en contra de la entrada en cuestión.

Algún Helios o alguna Perséfone me crucificará exclamando que este engendro de Satanás está en contra de la libre expresión. Otra vez, mal. Yo defiendo el libre tráfico de pensamiento con la misma entrega que un varón luchando porque no lo conviertan en eunuco. ¿Qué es lo que quise decir, entonces? Es muy sencillo: antes de publicar un comentario en un blog de este tipo, procure, primero, masturbar su mente para que eyaculen sus ideas. La homilía ha terminado, podéis ir en paz. Amén.

Chepe

lunes, 21 de julio de 2008

Limosna espiritual

Buenas noches. Este día me siento preparado para tocar un tema que no es muy amigable para nuestros queridos esfínteres. Los pondré en contexto: he sido católico practicante desde que tengo memoria, lo cual implica ir a misa todos los domingos, confesarme así como se le hecha gasolina al carro (si no entendió, significa que lo hacía muy seguido), comulgar, asistir a las fiestas de precepto, etc. Sin embargo, paulatinamente he ido notando algunos patrones que no son para nada justificables, y los cuales me gustaría compartir con ustedes. Debo aclarar que no estoy buscando convertirme en un apóstata y en el caso de que necesitara ayuda espiritual, no estoy interesado en este momento. Punto por punto, iré listando mis argumentos:

1. El ritual: ¿Alguna vez ha entrado usted a misa con toda la intención de dar un servicio excepcional al Señor, limpiar su alma, dialogar con Él, sumergirse en el Misterio de las Sagradas Escrituras o, simplemente, sentir la santidad del ambiente mientras usted participa de la celebración, para darse cuenta de que no tiene ni tiempo dar gracias después de la comunión? No hay tiempo de interiorizar en las iglesias porque todo esta fríamente calculado. Claro, recuerde que hablamos de una Eucaristía común de cada domingo (Gracias a Sofía Cedillos).


Es posible que la organización de la misa sea perfecta en cuanto a logística se refiere, pero a la mayoría de feligreses les abate. Lo cual me lleva a...

2. Los sacerdotes: Usted lo sabe, y yo lo sé. Estos señores no dan una. ¿Por qué? Empezaré por lo que más me molesta. Reflexione después de leer lo que expondré a continuación. Acabo de escuchar el Evangelio, y me preparo para el sermón-enseñanza del señor que tengo enfrente; él comienza a hacer una síntesis de las tres lecturas, lo cual me parece acertado; sin embargo, el clérigo se extiende ad infinitum hablando EXACTAMENTE de lo mismo que acababa de leer, o lanza un comentario tan patético que uno se pregunta cómo el catolicismo puede permitir que esta gente se gradúe en teología. Ejemplo:

Evangelio: "...y ella les dijo: 'Hagan lo que Él les diga'. Al instante, Jesús ordenó que llenaran los cántaros con agua hasta los bordes. Luego, pidió al mayordomo que probará el contenido, y este, maravillado..."

Sacerdote: "Aquí podemos ver como Jesús convirtió el agua en vino. Él no quería, pero María lo puso en una encrucijada. Ustedes notan que el la llama 'Mujer', pero eso no es peyorativo(...) este fue el primer milagro de Jesús".

Muchos de ustedes dirán: "Vos no podés pedir una grandilocuente reflexión acerca de un pasaje de la Bibila tan falto de gracia como ese". Si usted pensó eso, está muy mal. No todos los sacerdotes son así, pero el gran bulto con el que tratamos semanalmente deja mucho que desear. Con ministros así, apóstatas y ateos tienen toda la razón en criticarnos. No somos los únicos que padecemos esto, para ser justos. Ya sea un pastor evangélico, luterano, anglicano, etc., todos sufren de esta misma epidemia de mediocridad.

3. La antipatía de los católicos: Seamos sinceros. Si cuando usted entra su iglesia encuentra dos bancas, de las cuales una tiene a alguien en ella y la otra esta vacía, ¿dónde se sienta? Claro, escoge la vacía. Aceptemos que no nos gusta estar a la par de extraños en misa. En el único momento en el que volvemos a ver a quienes tenemos alrededor es al momento de la "paz" y, luego de eso, volvemos a ser extraños otra vez. ¿No es ridículo? Saben, mis queridos compadres católicos, a veces criticamos el fanatismo de nuestros amigos que profesan la religión evangélica, pero confieso que deberíamos aprender un poco de su calidez con respecto a los feligreses de sus iglesias (no entiendo por qué si alguien es evangélico y se le pregunta su credo, dice "cristiano" y uno lo relaciona con ellos... somos un bagaje de incultos).

Como conclusión, debemos quitarnos ese pensamiento retrograda de que por ser católicos estamos "bien". Si usted grita a las cuatro esquinas del mundo que es un modelo de cristiano, es probable que no lo sea. No podemos andar dando la paz y comulgando, profesando que hay que respetarnos unos a otros, cuando criticamos otras religiones, no defendemos la nuestra con argumentos VÁLIDOS, ni mucho menos cuando no volvemos a ver a la persona que tenemos a nuestro lado en la banca. No estoy en contra de la Iglesia Católica. No soy un anticristo. Ni ustedes tampoco lo son.

PD: Es posible que extienda este documento, pero solo si lo considero necesario.

Chepe

viernes, 18 de julio de 2008

Una pequeña contribución.

Hola, mis queridos visitantes. Tengo otra petición que hacerles. Hay un grupo de personas, que conozco y que respeto y adoro muchísimo, que ha empezado un proyecto de ayuda a las personas de tercera edad en nuestro país.

Han dado el primer paso al crear un blog informativo acerca del tema, pero necesitan de nuestra ayuda. Si tienen tiempo, visiten el link que les proveeré a continuación, y dejen sus comentarios, dudas acerca del proyecto o, incluso, ideas que puedan ayudar a estos emprendedores. Cualquier cosa vale, y ellos están muy receptivos al sentir de la gente con respecto a esto.

En resumen, ellos buscan ayuda de empresas que puedan subsidiar beneficios (económicos, educativos, de salud, etc.) a las personas de la tercera edad de El Salvador. Si usted está dispuesto ayudar, o sabe de alguien que pueda estar interesado, por favor comente en el sitio http://www.esengsi.wordpress.com/ , o plasme sus ideas en la sección de comentarios de este blog.

Muchas gracias por su tiempo, de antemano un gran apretón de manos por las futuras visitas que estas personas esperan de ustedes.

Chepe


jueves, 10 de julio de 2008

Épica rauleana


En la funesta hora que la justicia divina,
¡ay, desdicha!, ¡ay, injuria!,
delineó los pasos de tu juventud agnóstica,
tú, Adeodato, no esgrimiste en reparos cabizbajos,
porque la espiritualidad mata, corroe, envejece,
estupidiza, convence, pero no eterniza, ni salva.

Lo ves así, y así lo sostienes; empalador clerical
en noches carnavalescas, gladiador del ateísmo
conscienzudo, defensor de la anti-dulía,
paladín del estoicismo, eterno entre ángeles caídos.

Enfundado en tu casco níveo, con tu barba de bárbaro,
tu resolución de bronce y tu espada de acero,
ateo del agnosticismo, ¡te saludamos!

sábado, 5 de julio de 2008

El estigma de las "Comunicaciones" - Parte I


Tengo una duda. Espero que ustedes, visitantes de este blog, puedan ayudarme a solucionarla. La pregunta es la siguiente:

¿Por qué la licenciatura de Comunicación Social, ya sea impartida en la "Matías", la UCA, la "Mónica", la "Nacional", etc., es vista con desdén por estudiantes o profesionales de otras carreras?

Si tiene tiempo de dar respuesta a esta pregunta -con lo cual yo estaré muy agradecido- siéntase libre de ocupar la sección de comentarios. Tenga o no tenga un pensamiento afín con lo planteado anteriormente, su contribución será valiosa. Me encargaré de leer las respuestas que vayan surgiendo, y todas serán tomadas en cuenta. Espero que ustedes, queridos cibernautas, puedan ayudarme en esta investigación que quiero llevar a cabo.

Nota: No importa si la idea que tenía en mente ya fue dicha. Hágame conocer su opinión. Lo que me interesa es saber lo que la mayoría piensa. ¡Muchas gracias!

jueves, 3 de julio de 2008

El libro "libre"

¡Se me ha ocurrido una idea fantástica! Hace un año, escribí un manojo de sandeces acerca del movimiento "Libera un libro". Voy a publicar ese texto aquí. ¡Espero que les guste! Nada de plagios, ¿de acuerdo? Otra cosa: antes de criticar, léalo bien para asegurarse de que haya entendido bien mis ideas.

La campaña del libro

¡Ah, cuánto gozo guarda un libro! Por favor, queridísimo lector, únase a esta alegría que los poros del intelecto disfrutan al encontrarse, frente a frente, con esos portales a mundos desconocidos, fórmulas fantásticas, lecciones para la vida y anárquicos cuestionamientos. Créame, fausto receptor, que nada me causa más regocijo que saber que el conocimiento se transmite poco a poco, acabando así con la ignorancia fanfarrona que se vive y respira en cada metro cuadrado del terruño nacional (siendo yo uno de esos ignorantes, para ser honestos y justos). Si me lo permite, déjeme tratar un evento fecundado con la nobleza y entusiasmo pertinentes, pero que carece del raciocinio necesario de parte de los participantes. Me refiero a la campaña “Libro libre”… o, ¿“Libera un libro”? ¡Bah! Eso es lo de menos.

Puede que usted, en este preciso momento, esté en desacuerdo con lo que propondré, lo cual es normal y comprensible: si gustos no hubieran, las jergas no se vendieran. Ahora, mi jocoso destinatario, permítame “liberar” las ideas que me asaltan la cabeza, pidiéndole, de antemano, que las medite de manera imparcial. Aquí voy:

- Afirmo que no se puede erradicar la falta de hábito de la lectura con este tipo de campañas, pues mientras los donatarios se enriquecen, los donantes se empobrecen.

- Afirmo y sostengo lo anterior, porque estoy seguro de que el 98% de los solidarios no ha leído más de 4 libros por su propia cuenta (mucho menos el que está donando, pues seguro es de los que asignan el colegio).

- Además, afirmo que, si ha leído algo, la selección del individuo entra en estas categorías: esoterismo, informática (panfletos sobre como jaquear mensajerías instantáneas, o uso del “photoshop”), Paulo Coelho, Nidia Díaz, documentos relacionados con el “Che” Guevara, Maxim, etc.

- Afirmo, también, que leer La Biblia, o incluso el Kamasutra, resulta más provechoso que los arriba mencionados, pues su carácter histórico es tan importante como su carácter sagrado.

- Afirmo que usted, en este preciso momento, puede estar pensando que Paulo Coelho es un buen escritor.

- Afirmo que usted tiene razón, pues es un hombre muy creativo al exponer sus ideas; sin embargo, sus libros no estimulan la capacidad comprensiva del lector debido a la fácil interpretación de su mensaje (nota: esto es ambiguo, y considerarlo como bueno o malo queda a su discreción).

- Niego estarle induciendo a que lea el “Geymonat mayor”, o algo de esa índole.

- Afirmo que regalar un libro de texto es comparable con regalar un directorio telefónico de hace diez años, por muy en desacuerdo que esté el mundo (estoy empezando a retractarme, porque al menos el directorio telefónico posee una pizca de valor histórico).

- Afirmo que no podemos enseñarle a alguien caminar si nosotros no sabemos mantener el equilibrio.

- Afirmo, con la “afirmación” anterior (valga la bendita redundancia), que no podemos instar a alguien a que lea un libro sin siquiera haberlo leído nosotros.

- Afirmo, por último, que el deshacerse de un libro es la peor ingratitud que se puede cometer contra el intelecto propio, y que hacerse la idea de que es un “acto de solidaridad” es una farsa más grande que Castro logrando la olímpica producción de azúcar de más de 10 millones de toneladas a finales de los 60.

Me sentiría contento de saber que usted está de acuerdo con, al menos, una de mis ideas; no obstante, si usted considera que lo que aquí se ha escrito es pura tontería por parte de un “antisocial criticón e ignorante”, o cualquier otra licenciatura que se me quiera atribuir, déjeme, aunque sea, dejarle con una frase muy bonita, cierta y útil. Hasta luego.

Una mentira es como una bola de nieve: cuanto más rueda, más grande se vuelve – Martín Lutero

José Mario Cornejo

miércoles, 2 de julio de 2008

"¿Por qué me quitó el 'naylon'?"

No pude evitar reírme de Norman Quijano al ver el papelón que montó en el redondel ese. Algunos aseguran que fue un show armado por el mismo Quijano, y otros lo montan en el caballo de prócer en defensa de los símbolos patrios (que a nadie le interesan en este país, que no me vengan a dar paja a mí).

De cualquier forma, uno se da cuenta de los asnos que quieren ir por la alcaldía. Por un lado, tenemos a la actual alcadesa, que lo único que ha hecho es poner banners verdes con su nombre y una estrella, complicarse la vida con los vendedores del centro y no arreglar el parque de mi colonia. El otro contendiente es un bobalicón que hace el ridículo montado en su bicicleta, arma berrinche por un "naylon" y se pone a bramar por algo que a cualquier salvadoreño le resbala -y los que reclaman que es una "traición", solo querían salir ante la cámara.

Clamor general: traigan a Héctor Silva.

martes, 1 de julio de 2008

"¿Qué pensás de la hipocresía?" Agárrate los huevos y decímelo a la cara.

Así comenzaste tu plática esta noche. Hipócrita. Hipócrita. Hipócrita. Si te das cuenta, hay un comentario donde uno de mis aludidos hace mención de haber hablado con vos. Ya sabía a lo que ibas, y aun así te escondiste bajo truquitos de niña quinceañera queriendo descubrir al novio "dándole baje". Podría decirte esto a la cara, inhumano, pero ya que querés pelear en mi cancha, te voy a dar atol con el dedo. Te pido que leas lo siguiente, pues por ser de mi familia te va un escarmiento mayor que a cualquiera, y que conste que no sos el primero al que le cae. Quería ir por partes, pero tu estructura escrita está desordenada, así que haré milagros.

Sí, este "texto" es una "crítica". Nadie te ha llamado ignorante, mi querido ignorante. Te califiqué de reactivo, si es que aun te recordás de lo que eso significa. Sí, hice lo que tenía que hacer y como debía hacerlo, y podés preguntarle a Diana, que está en el mismo foro en el que vos has venido a vomitar palabras, no, sandeces. Yo no quería "arruinarte" el espíritu, "Jugo", pues si bien es cierto que creo poco en los voluntarios de esta ONG, prefiero que vivás en carne propia algunas de mis experiencias. Solo así se aprende.

"Está comprobadísimo", "Ramiro", que tu teoría se desquebraja como carbón cayendo al suelo si te sitúas dentro del campo en cuestión, que es la zona marginal latinoamericana. Podés preguntarle a cualquier campesino salvadoreño, incluso uno beneficiado por este movimiento, lo que desea para los años venideros, y la respuesta de moda es: "Que el Gobierno nos saque de esta pobreza". ¿Te dice algo? Espero que sí.

Exacto, dejá que me entienda con gente experimentada como Godoy, Ute (o Amanda) y Diana, porque cuando recibo de tu parte comentarios como: "No, no puede ser así", no hay mucho que hacer. Lo peor es que me pedís formas de "solucionar el problema" que sean "100% humanistas", cuando, seguramente, no conocés el término humanista en su totalidad. Te he dicho hasta la saciedad que el enfoque principal para acabar con la desidia de la población -que se extiende desde la negligencia hacia talentos musicales (si, allí estas vos, porque sos muy bueno con la guitarra, y lo digo en serio), teatrales, literatos, etc.- es la educación. Techo es -y ya me duelen las yemas de los dedos de tanto digitarlo- una idea espléndida que, con buena administración, puede llegar a convertirse en algo grandioso.

No tratés de hacerte el "vergoncito" conmigo, retándome cuando me pedís un concepto de solidaridad mejor que el de "ustedes". No hables por todos, por favor.

"¿Te quitarias el pan de la boca para darselo a un heramano salvadoreño y saciar su hambre?¿Te quedarias con hambre tú?".... ¿Qué? ¿Fue eso necesario? Sé que tu pregunta es metafórica, pero como el contenido anterior es "básico", me voy a quedar en esa simplicidad, y te respondo: ¡Pues claro que lo haría, no sería la primera vez que me voy a dar comida al primer indigente que me encuentro por las calles!

Voy a citar, ahora, tu último comentario, para despedirme de vos y de este fantoche que has armado por gusto cuando ya todo se había terminado. Pero claro, no te dignas ni a leer lo que hemos tratado los "entendidos" durante tu husmeo en este blog. Bueno, dijiste lo siguiente:

"¿Todos necesitamos ganar no?Me gustaria escuchar tu respuesta a estas interrogantes y tu propuesta de como tendria que funcionar una organizacion humanistica, pero mas que todo me gustaria que la echaras a andar y que te dejes de estar criticando(lo cual a la larga no es algo productivo) y de estar violando la privacidad, la confianza y el respeto por la persona que con mucha confianza, humildad y admiración te entregó ese trabajo. No me parece justo que te regocijés pucblicamente en tus momentos de oscio con las conversaciones que entablas con las personas que "respetas" o "qerés"..."

Julio Rubén Trujillo, futuro licenciado en Economía de la Escuela Superior de Economía y Finanzas, quiero que me diga usted desde cuándo PUTAS la crítica no es productiva. Disculpame, pero es que vos sos, como dirían los españoles, un "pasota". Sí, quizá algún día forme mi movimiento, y quizá hasta trabajemos de la mano con Techo. Eso sucederá cuando todo este bien planificado, pues yo no me voy a tirar al agua sin un plan B, como vos.

Vamos, ahora, a mi parte favorita. ¿Qué privacidad he violado? ¿Qué confianza? ¿Qué respeto? Ah, es que el niño dice que yo publiqué su trabajo. Mire, qué mongol. ¿Dónde está ese texto, Julio? Lo siento, mi querido disidente del lenguaje, pero hice alusión a una plática que vos y yo tuvimos, no a ningún trabajo tuyo, que jamás en la vida publicaría por aquí. Por cierto, gran patán, por si no te has dado cuenta, ni siquiera hago mención de vos. Sos "Ramiro". Yo no me regocijo públicamente por una conversación tan banal como esa. Podría ocupar miles más entre vos y yo, de las cuales podrías reclamar porque allí sí, mirá, tu intelecto y tu falta de "humanismo" quedarían al descubierto. Tampoco hago blogs en mis momentos de ocio, no me comparés con tus amiguitos que, seguramente, crean espacios donde ponen fotos sacando la lengua y contando lo mucho que les gusto el concierto de Sin Bandera.

¿En qué momento he sido yo hipócrita en este blog, en mi trato hacia vos o en lo que se te pueda ocurrir? Jamás. Te he dicho las cosas que pienso de tus ideas y de la de los demás. En la crítica que hice ocupé un fragmento de nuestra plática para dar a conocer la forma de pensamiento de los nuevos voluntarios, que es algo que vos mismo has admitido. Nada tiene de malo. Si usé técnicas narrativas fue para hacerlo menos monótono, y ya. Después de pedirte que me dijeras si algo te molestaba, negando vos cualquier agravio de mi parte, para luego encontrar esta marejada de mierda, solo te define como algo: hipócrita.

P.D.: Te recomiendo que pensés lo que vas a escribir la próxima vez, pues la gente por la que me enteré de tu comentario te hizo trizas, muy a mi pesar. Enseñáselo a quien se te pegue la gana. Y como dicen los miembros de "pijazo.blogspot.com", si te pica, rascate.

José Mario "Cornejo Machado Palomares Canjura Henríquez Campos".

Respuesta pública:

¡Hola a todos!

Habrán notado el revuelo causado por cierto texto publicado acerca de una ONG de este país. Me he tomado la molestia de contestarle a cada uno de los participantes del pequeño foro que se hizo en la sección de comentarios.

Sepan que, como don Tony Vaca aquí presente, yo recibo sus comentarios y quejas con una sonrisa. Me encanta saber lo que la gente piensa. Sonrío aun más cuando me dan la oportunidad de atacar de vuelta. Admito que a tres comentarios les he tenido consideración, pues son inteligentes y bien pensados. A otros dos, sin embargo, les tuve que dar una lección "con sentido humano". Lean lo que les interese. Si leen todo, me harán llorar como niña de pre-kinder. Gracias y feliz día de parte de Tony Caca y mía.

A quien interese: si usted quiere conocer los comentarios originales de los cuales se derivan las sandeces que encontrará a continuación, revise la sección de "Comentarios" del texto "Un techo para mi país".

Querido Godoy:

Me voy a saltar hasta el tercer párrafo porque allí está lo que me interesa debatir. Lo que usted ha expuesto anteriormente son cosas archisabidas por mí, y no es necesario que exponga por enésima vez lo que pienso de las cosas que pueden mejorarse.

Primero que nada, déjeme contarle - o mejor dicho, aclararle- que la intención de mi plática con Ramiro no era hacerme una opinión de Techo, ni mucho menos dar a conocer al mundo la negligencia de este cerebro de anfibio. Mi intención era exponer lo que yo pensaba que podía mejorarse con respecto a algunas ramas de su proyecto que están un poco laceradas. Mi irreverencia suena destructiva, pero hay que pelar la cáscara para llegar a lo bueno del nance. A usted se le olvidó eso.

Tengo otra cosa que reclamarle: usted me tacha a mí de ignorante. Es una pena que, como usted afirma al final de su texto, no haya leído las demás entradas en mi blog. Es una pena, también, que este espacio se haya dado a conocer al público sin mi consentimiento, pues aún está en construcción. Antes de calificar a alguien como un retrograda, usted debería cuestionarse si conoce lo suficiente de esta persona, o investigar si los argumentos que se exponen están fundamentados.

La hostilidad, mi querido colega cibernético, es algo que terminará de despedazar su sueño si la emplea para defenderlo. No hay mejor arma que el estoicismo y la calma. Si no, usted se hace daño. E insulta a otros.

Está bien que usted se queme por lo que apoya. Lo admiro. Parece que, al igual que la niña Diana y la niña Ute, usted tiene buenas intenciones, no como la mayoría de mandriles con los que me ha tocado convivir en mis dos campamentos.

Le repito: mi crítica no es destructiva.

Tenga un buen día. Ojalá que no se torne como cierto par de sujetos que lo único que han causado en mí, con sus fecales argumentos, es aborrecimiento por su cuerpo de voluntarios que, con bandera en alto, dan a conocer su ignorancia. Hasta pronto, don Godoy, y le agradezco su visita.

Querida Ute:

Leí tu comentario más de una vez, te lo aseguro. No estoy prejuiciado, y trataré de argumentar los puntos débiles de lo que expusiste.

Aclaro algo: ya participé de dos de estos campamentos y no creo que el patrón se haya repetido por pura coincidencia. Ute, aparte de vos y algunos seres bienintencionados, a NADIE le importa el porvenir de las familias. Sí, yo sé lo del sondeo inicial y de lo horrible que es decirle que no a alguien que te pide una casa, casi llorando, porque no califica. Yo no estoy luchando en contra del proyecto, estoy luchando en contra de la negligencia de unos que lo ven como la panacea universal.

Con respecto a las "reglas básicas", son una farsa. Lo siento, pero en dos ocasiones he visto a mis compañeros vomitando, hablando sandeces y tambaleándose sobre cualquier fémina que se les cruce enfrente. No hay que mencionar la resaca del día siguiente. Un día entero me tocó a mí solo trabajar con tres mujeres de mi cuadrilla y el señor de la casa haciendo una zanja, pues mi otro compañero estaba tumbado sobre la pila de grava, y cuando se levantaba era para visitar a su novia en la otra cuadrilla.

Por respeto a las familias, decís vos. Respeto. ¿Te cuento lo que hizo una maravillosa persona de mi clase de BT, en ese entonces, que estaba cenando con nosotros? Lanzó un "¡guácala!" por la comida que las señoras del cantón nos habían venido a preparar. Ellas estaban frente a nosotros. Respeto no hay.

Me alegra que lloraras. Admito que me sentí feliz por la niña Irma y sus niños cuando le entregamos la casita -que como anécdota, te cuento que debido a la mala logística, tuvimos que esperar hasta las ocho de la noche con la familia porque las llaves no estaban a la hora de la entrega. Yo sé que se construye hombro con hombro... jajajá, me doy cuenta de que todos ustedes obviaron la parte en la que menciono que yo ya participe en dos campamentos. Típico salvadoreñismo, solo nos rascamos donde nos pica.

Ute, con respecto a los proyectos que se mueven a raíz de los jóvenes de Techo, y para no repetir lo que escribí un par de veces ya, te recomiendo que leas la respuesta que doy a dos individuos que también plasmaron sus comentarios.

Aparte de la melosidad de tus balbuceos finales, estoy convencido de que el proyecto y vos son como uña y carne. Voy a darte un consejo, que no espero que sigas: antes de contestar un post, te pido que lo leas detenidamente, pues te hubieras ahorrado muchas palabras de haberte fijado que tu servidor ya ha sido parte de esa legión a la que pertenecés.

Con respecto a lo del tono, tranquila. Has cumplido con la regla número uno para rebatir un comentario: combatir la opinión respetando al emisor. Trabajá para mejorar flaquezas. Esas flaquezas que quizás vos no, pero otros -como yo- han vivido y han terminado por alejar a voluntarios. Recordá que la acción sin planificación está dispuesta a la perdición. Ción. Ción. Ción. Ah, la cacofonía es delirante.

Querida Diana:

Gracias por tu comentario, Diana. El "voseo" que empleo contigo es porque te conozco, pues estoy seguro de que fuimos el año pasado a Tecoluca con la ESEN.

Sé que estás muy metida con la causa. Lo respeto. Vos sabés bien que lo que expuse acerca de los lineamientos que la mara no sigue es muy cierto. Las borracheras abundan, la virilidad flota en el aire, y la gente llora falsamente. Ambos lo vimos. Algunos líderes de campamento*, junto con El Enano (que bebió su poquito), dijeron que era permitido ingerir bebidas alcohólicas, pero con moderación. ¿Qué pasó esa noche? Una niña, la "Rovirita", cae desmayada por mucho tomar y fumar. La organización está mal, muy mal.

No tengo mucho que decir, pues sos de las pocas personas, si no es que la única, que con meros argumentos (como debe ser) ha confrontado mi crítica. Disiento en algunas cosas, pero son puntos que pueden mejorarse. Te mando un saludo y un abrazo, aunque seguramente no recordas quién soy.

Si usted no es la persona aludida, la felicito por su ponencia. Eso es en serio. A veces, deberíamos seguir el ejemplo de personas como el "maitro" de mi foto. Usted va en buen camino. ¡Adelante!

* = Editado. Reconozco mi error, pues no fuiste vos la que dio permisividad para el flujo del alcohol.

Querido prestamista:

Con respecto a la palabra eslogan:

"Eslogan: Fórmula breve y original, utilizada para publicidad, propaganda política, etc." - RAE.

Con respecto a la palabra nombre, elegí la definición más apropiada de las varias que aparecen:

"Nombre: El que se aplica a personas, animales o cosas que pertenecen a una misma clase, especie o familia, significando su naturaleza o sus cualidades" - RAE.

En todo caso, el título del movimiento es un eslogan, ¿no? Y antes de que me salga con "pero allí dice publicidad, propaganda política", yo le recuerdo que el "etc." que usted encuentra indica continuidad en los ejemplos de las cosas a las cuales se les aplica un eslogan. De cualquier manera, solo quería aclararle eso, que ni venía al caso.

¿Sabe algo? Gracias por decir que mis aportaciones son rescatables, y tiene razón: me quedé corto al exponer mi punto. Recuerde que transcribí literalmente una conversación que tuve con cierto personaje, cuyas pocas luces no le permitirían entender más de lo que le expliqué en ese momento. Sí, yo sé que ustedes dan asistencia post-construcción. Sí, yo sé que ustedes se reúnen con la comunidad beneficiada antes y después. Amén. Amén. Amén. Eso está bien. También es cierto que es absurdo que alguien se vaya hasta un lugar remoto para darse cuenta de lo mal que estamos. No hay ninguna duda, y está en lo correcto.

Sus ideas eran bastante reflexivas, hasta que llegó al segundo párrafo, donde cometió un error garrafal. Me llama analfabeta. Mire que chistoso. Por lo menos el primer individuo me califica de ignorante, lo cual parecería más apropiado. En cambio, usted, emulando a cualquier asno altivo y pedante que insulta como si estuviera en una taberna, me llama analfabeta. Me llama así alguien que pretende escribir bien, pero que da pena en la puntuación de sus párrafos (confunde comas por puntos y seguidos), no tilda pronombres personales ("tu lo necesitas") y que predica que el nombre de su institución NO es un eslogan. ¡Puta, pues!

He tratado de concentrarme al máximo luego del revés anterior. Prosigo.

Mi querido prestamista del intelecto, usted menciona que los diversos servicios que prestan van más allá de la casita construida. Le cuento que, después de las susodichas construcciones, esperé un tiempo prudencial para acercarme a las comunidades a las cuales había ido a hacer mi "labor humanitaria", que eran la comunidad El Cristal (creo que así se llamaba), en Tecoluca, y otra comunidad cuyo nombre no recuerdo ahora, que estaba en Talnique. Pregunté a algunas personas cómo se sentían luego de haber recibido sus casitas. El clamor general fue que, si bien era cierto que les era útil para guardar sus "cachibaches", sentían que se les había olvidado. Sí, hubo intentos de alfabetización y todo lo que mencionó usted, pero no se tomó en cuenta a toda la comunidad. No lo digo yo: lo dice esa gente que en su día recibió las llaves de su casita, un diploma, y unas tijeras para inaugurar su nueva vivienda.

Vuelve a tener la razón, sin sueños no hubieran milagros.

"Se nota el cambio que dan luego de conocernos: se rebuscan por trabajar más, mandan a los niños a la escuela, se unen como familia, se les ve más felices y, sobre todo, AGRADECIDOS".

Yo sé, yo conozco eso, lo he visto. Claro que van a estar agradecidos, mi querido filósofo, eso es obvio. No obstante, ¿cuánto cree que durará el esfuerzo que se hace? Mire, deje que YO le hable en términos económicos, ya que usted falló miserablemente. Se lo pondré fácil. Usted proporciona una casa, y con eso hace que los recursos destinados a ese objetivo virtual se ocupen en otras cosas, como por ejemplo, la educación de los niños. No ha tomado en cuenta un detalle, y es que cuando usted proporciona una casa, las personas deben preocuparse ahora por gastos de luz y agua, por poner dos casos. Citando a un buen amigo mío: "Imaginate que yo agarro a un niño en el colegio, y le provoco un raspón. Su papá lo cura cuando llega a casa. Yo, al siguiente día, le causo otro raspón. El papá no puede pretender solucionar en problema, o al menos, aminorarlo, curando la herida día con día, pues esta se hará más grande conforme pase el tiempo, llegando a ser nociva para la salud del niño". No tengo que explicar eso, ¿o sí?

Otra cosa: el Estado jamás se preocupará por la educación de la gente si esta no muestra interés. No es que yo sea partidario de izquierda, para nada, pero a veces creo que una dictadura como la cubana vendría bien, pues se obliga a la gente a asistir a la escuela... Ah, ¡si usted viera! Los cubanos son gente tan instruida y agradable. Pero como solo a palos queremos lo latinoamericanos...

Para terminar: siga con su sueño, es interesante y sé que, si no es usted, alguien más lo va a lograr. Ese es el punto. Deje un legado, pero antes planifíquelo bien.




Querido acaramelado:

Déjeme suspirar hondamente antes de empezar con usted, mi querido pimpollo. *Suspiro*. Muy bien. Primero que nada, y esto es un consejo para sus fines "blogueros", voy a señalarle algo para que usted no pase de payaso ni haga el ridículo con quienes leen en su espacio personal.

Consejo: no se agrega "s" al final de los verbos conjugados en segunda persona del pretérito perfecto simple. En otras palabras, no se dice "dijistes", ni "trajistes", ni "prometistes", ni ninguna que a usted, mi terroncito de azúcar, se le ocurra vomitar o digitar.

Además, no soy ningún "stranger", pues firmo bajo el mote por el cual todo el mundo me conoce. Mi nombre es José Cornejo, y no necesito bautizarme bajo ninguna frase carente de inteligencia, pseudónimo que denote (no que connote) homosexualidad o falta de sentido común, o nombre ajeno.

No quise empacharme con usted, querido X (porque usted sí que es un "X", y me rehúso a etiquetarlo por su "blogapodo"). En fin, permítame citar su pregunta, para así contestarla de la manera más concisa posible:

"¿Cuál es tu super aporte a la sociedad que criticas con tanta osadia o acaso tienes una mejor idea ?"

Bueno, mi niño, como usted sabrá, la crítica a la sociedad en la que se vive es parte del crecimiento intelectual de ser humano. Mi aporte momentáneo es no ser ovejita ni creerme todo lo que me quieren zampar en un supositorio. Con respecto a que si tengo una mejor idea: sí, la tengo. ¿Cuál es? Se la voy a comentar de forma superficial. Siempre he sido partidario de que lo que le falta a este país es educación. La gente espera que las soluciones las traiga el nuevo gobierno, porque así les han enseñado, a creerse todo lo que se dice. El nivel intelectual (ojo: no cultural) está por los suelos, y MI sueño es formar un grupo de jóvenes que, en vacaciones o en fines de semana, se dediquen a viajar a los cantones y proporcionar alfabetización a esas personas que así lo deseen. Mucha gente está de acuerdo con la idea. Otro grupo, no. ¿Por qué cree usted que no la aceptan? La respuesta la va a encontrar en un post dirigido a otro de mis admiradores.

Repito: la idea del campamento que ustedes defienden a capa y espada es nobilísimo, pero la organización es mediocre. Nuestro país necesita a esos "sin frontera" que tanto bien le hacen al mundo. Pero no de la forma en que se hace. Yo ya fui a dos campamentos y quedé asqueado.

Otra cosa quiero decirle, ya para terminar: usted afirma que es fácil hacer una entrada en un blog, pero difícil aportar algo a la sociedad. Debo admitir que tiene razón. Las personas que arriba me han llamado "ignorante" y "analfabeta" han hecho más por defender la causa que usted. Yo lo respeto como persona, pero su opinión, por la forma en como está estructurada y por el nivel comunicativo que presenta, es practicamente nula. Sin embargo, le agradezco su visita al blog, y espero que disfrute su campamento, pues allí podrá lucir su bronceado.